miércoles, 28 de febrero de 2007

Rafael

Una vez, siendo dolescentes, cierto personaje al que los mios y yo recordamos con cariño y extrañeza al mismo tiempo, nos preguntó:

¿ Por qué hacéis la javierada ?

Sentados en el frontón del colegio de Javier, cansados y medio dormidos, el silenció evidenció la realidad :

Ni puta idea.

Ante la perspectiva de vernos humillados y con la esperanza de salvar el poco orgullo que nos quedaba tras caminar bajo la lluvia 54 Km sin razón aparente ,comenzamos a farfullar :

¡¡Porque nos lo pasamos bien!! ¡¡Porque somos cristianos!! ¡¡Porque somos navarros!!



Personalmente creo que el tipo que nos hizo la pregunta tampoco tenía una idea muy clara del porqué. Se rió de nosotros, nos apretó las tuercas, nos humilló, nos enfadamos un poco con él, con nosotros mismos y con la situación.

Ahora me acuerdo de vez en cuando de este pasaje de mi juventud , de aquel personaje, del enfadico...
Pero siempre me pregunto el porqué de las cosas.

Supongo que así es la educación...

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